Sin Título
En el jardín de los recuerdos, donde las flores se marchitan y mueren, dos almas rotas se encontraron, con corazones que sangran y no pueden detenerse. Ella, con ojos verdes como la esperanza, apagados por el dolor y la tristeza, él, con ojos azules como el mar, que reflejaban tanto amor como tristeza. Se miraron, y en ese instante, el tiempo se detuvo, todo fue un misterio, el destino les había unido, en un amor que parecía eterno y serio. El viento susurraba secretos, que solo ellos podían oír y sentir, y las flores parecían cantar, una melodía que los hacía temblar de existir. Él le ofreció un ramo, de flores marchitas, sin vida ni color, pero en su gesto había amor, un deseo profundo de sanar su dolor. Ella lo miró, y supo que era verdad, y que su amor era sincero, y en sus ojos azules, vio un destello de su propio amor, tan puro y verdadero. Ambos habían dicho, "nunca más" con lágrimas y un profundo pesar, pero ahora se encontraban, en un amor que comenzaba a resplandecer y a brillar. Pero el miedo y la duda, les hacían temblar y comenzar a vacilar, y no sabían si debían creer, en un amor que parecía frágil y sin par. Se miraron, con mezcla de miedo y deseo de amar, y supieron que debían arriesgarse, a un amor que podía florecer y brillar. El amor, que había sido, su mayor ilusión y su peor pesadilla, ahora parecía, una oportunidad, de encontrar la paz y la maravilla.
by Jadirh González
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9 months ago